Bicicletas de ruta: ¿Cómo elegir la correcta?

Las bicicletas de ruta se han convertido en un medio de transporte muy utilizado por las personas. Algunos las eligen para fortalecer su condición física y su salud. Otros, en cambio, lo hacen para satisfacer sus deseos de libertad e independencia. 

Con el correr de los años, las bicicletas de ruta se han ido diversificando para adaptarse a muchas competiciones. El ciclismo de ruta o ciclismo de carretera es una de las disciplinas deportivas en las que muchas personas se quieren iniciar. La sensación de cortar el viento y liberar adrenalina en cada pedaleo es muy exigente pero reconfortante.

Largas distancias, altas velocidades y terrenos diversos, son demandas que este tipo de rodados pueden satisfacer con creces. A diferencia de las bicicletas clásicas, las de ruta están diseñadas ponderando la velocidad, la potencia y los recorridos extensos.

Las múltiples posibilidades de uso que brinda una bicicleta de ruta, obligan a prestar atención a sus características particulares. Si tienes dudas acerca de: ¿Qué son? ¿Qué ventajas ofrecen? ¿Para qué sirven? ¿Qué tipos hay?. Para ello hemos preparado este post, todas estas preguntas te las resolveremos a continuación. ¡Allí vamos!

¿Qué es una bicicleta de ruta?

Las bicicletas de ruta, también conocidas como bicicleta de carrera, están diseñadas para la velocidad y el recorrido de largas distancias. Para su construcción, se prioriza la comodidad de desplazamiento y su rapidez. Esto debido a la amplia gama de empleos que ofrecen dentro del ciclismo.

Estas bicicletas están construidas con materiales ligeros. Gracias a ello, nos garantizan condiciones ideales para su utilización en competencias o entrenamientos. A su vez, cuentan con un diseño tal que permite la adopción de una postura aerodinámica. Así, la transmisión de potencia a los pedales puede realizarse de la manera más eficaz posible. Puedes identificarlas por sus ruedas delgadas y su manubrio que se curva hacia abajo y de vuelta hacia ti. 


Bicicleta De Ruta De Fibra De Carbono De Alto Rendimiento, Rin 700 Benelli. Color Gris/Negro.

Bicicleta de Ruta

A continuación, te mostramos sus principales ventajas:

  • Diseñadas para la velocidad y las largas distancias
  • Facilitan posturas aerodinámicas
  • Materiales ligeros
  • Bajo peso y buena resistencia
  • Sistemas de freno y cambio de marcha modernos
  • Rapidez y confort
  •  Aptas para caminos pavimentados o con algunas irregularidades
  •  Buenas para la competición y el entrenamiento

Las bicicletas de ruta se presentan con diversas características. Esto en función de cada una de las competiciones y funciones a las que se adaptan. Cada una de las competiciones del ciclismo requiere de un tipo específico de bicicletas. Para responder a esto, las bicicletas de ruta se han diversificado y adaptado a muchas necesidades distintas. A continuación, te mostramos los diferentes tipos que hay.


Tipos de bicicletas de ruta

Bicicletas de ruta tipo sport: Cuentan con diseños geométricos cómodos. Esto permite evitar la adopción de posturas típicas del ciclismo. De entre todas las bicicletas de carrera, las sport son las más sencillas y seguras. Especialmente, para aquellas personas que desean incursionar por primera vez en el mundo del ciclismo. Para aquellos que piensen en recorrer sus primeros kilómetros sobre una bicicleta de ruta, las de tipo Sport son las indicadas.

Bicicletas de ruta tipo escaladoras: Diseño aerodinámico y cómodo en partes iguales. Este tipo de bicicletas son las indicadas para aquellos que practican el ciclismo de montaña. Así como también para los iniciados en el deporte. Son las bicicletas más versátiles y con mayor demanda en el mercado. Esto las vuelve un producto bastante accesible.

Bicicletas de ruta tipo aero: Diseñadas para la alta velocidad, las rutas y las bajadas. Este tipo de bicicletas es ideal para aquellas personas que priorizan el rendimiento y la competencia. Su diseño geométrico a base de tubos planos reduce al mínimo el efecto producido por la fricción del viento. Su agresividad, en términos de performance, tiene como contracara una menor comodidad a la hora de su manejo.

Bicicletas de ruta tipo contrarreloj: Se caracterizan por un diseño aerodinámico y de avanzada para adaptarse a competencias como el triatlón. Su punto fuerte es la velocidad. Por el contrario, es un tipo de modelo incómodo para montar. Son las bicicletas de ruta ideales para aquellos ciclistas que compiten haciendo énfasis en el tiempo (triatletas).

Bicicletas de ruta tipo pista: Se distinguen por su diseño ligero y dinámico. Gracias a ello, estos modelos permiten a los ciclistas alcanzar buenos niveles de velocidad en pistas de competición como los velódromos. Este tipo de bicicletas de carrera son las indicadas para aquellos ciclistas experimentados y amantes de las competiciones contrarreloj.

Bicicletas de ruta tipo gran fondo: A la hora de recorrer largas distancias, son el tipo ideal. Su diseño y geometría garantizan comodidad para aquellos ciclistas que se prestan a muchas horas de recorrido. En este sentido, las bicicletas de ruta de tipo Gran Fondo cuentan con un diseño material reforzado que resiste el paso sobre caminos irregulares.

¿Cómo se compone una bicicleta de ruta?

A diferencia de las bicicletas clásicas, las de este tipo cuentan con un diseño específico para adaptarse a la competición y los entrenamientos.

Sillín o silla: Mejorada para amortiguar los impactos que pueda sufrir la bicicleta en su recorrido sobre terrenos regulares e irregulares.

Ruedas: Diseñadas para generar la menor fricción posible en la carretera: llantas angostas, neumáticos ligeros y con buena capacidad de giro.

Transmisión: La parte más compleja en las bicicletas de ruta (pedales, cadena, platos, etc.)

Manillar: Pensados para coincidir con el ancho de los hombros del ciclista, asegurándole comodidad o control adicional según donde se ejerza la empuñadura: parte alta o parte inferior del manillar.

Palancas de freno y de los cambios: Las bicicletas de ruta cuentan con ambos sistemas integrados en uno solo, de modo que al presionar las palancas hacia el cuerpo del ciclista, se activan los frenos; mientras que al presionar hacia afuera, se produce el cambio de marcha.

Eje de la dirección: Ajustable de modo que el ciclista pueda graduar qué tan firme o suelto desea la dirección y el manejo de sus manillares.

Potencia: Es la parte del marco que atraviesa horizontalmente a la bicicleta, cuya longitud determinará la posición del ciclista al montar la bicicleta.

Cuadro o marco: Su composición material puede ser de aluminio, acero, titanio o fibra de carbono. En las bicicletas de carrera, el cuadro debe asegurar amortiguación, fortaleza, rigidez y ligereza al mismo tiempo.

 

Criterios de compra 

Material 

La composición material del cuadro de este tipo de bicis influirá en su desempeño. Cada material supone prestaciones y limitaciones por parte de la bicicleta.

Tipo de uso o competición

La elección de la bici de ruta depende del tipo de uso. Existen diferentes tipos de competiciones en el ciclismo. Y cada una de ellas demandará de nuestra bicicleta ciertos atributos por sobre otros.

Rodado y talla

El rodado y la talla son fundamentales a la hora de escoger una bicicleta de ruta. De ello dependerá la comodidad y el rendimiento que podamos tener de nuestra bicicleta.

Si la talla que seleccionemos no es acorde a las dimensiones de nuestro cuerpo (altura, ancho, peso), esto puede dar lugar a un andar incómodo. Peor aún, las lesiones graves en rodilla, espalda y articulaciones no tardarán en aparecer.

Por el lado del rodado, el ancho de las ruedas más utilizadas en bicicletas de ruta oscila entre los 23 y los 25 mm, si se busca velocidad. En cambio, para un mejor control es recomendable ruedas cuyo grosor esté entre los 28 y los 32 mm. 

A medida que aumenta el ancho de las ruedas, también lo hace su control en el manejo. Y esto se traduce en un aumento del peso de la bicicleta  y una menor velocidad.

Tipo de frenos

El tipo de frenos es clave a la hora de escoger una bici de ruta. Su elección depende del tipo de uso que le demos. Por lo general, existen dos tipos de frenos:

Frenos de llanta: Consiste en dos picaportes ubicados en el manillar. Su presión se traduce en una acción similar sobre los neumáticos. Esto posibilita que la bicicleta frene de forma segura y ligera. Su acción se ve limitada en caminos de descenso o bajadas con mucha velocidad.

Frenos de disco: Se apoya en discos de metal unidos a ambas ruedas. Ante la presión de las pastillas, los discos bloquean las ruedas y detienen la marcha con un menor esfuerzo. La contrapartida de este tipo de frenos reside en el agregado de peso que suponen para la bicicleta de ruta.


Criterios de compra y tipología se vuelven dos filtros claves a la hora de realizar tu elección. Esperamos que este post te haya sido de ayuda. Y, en este sentido, procurar que la elección de tu próxima bicicleta de ruta sea la más acertada.

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